sábado, 25 de noviembre de 2023

LA 'CIUDAD VIEJA' DE CÁCERES, PATRIMONIO MUNDIAL DE LA UNESCO (26 de noviembre de 1986)

37 ANIVERSARIO DE LA DECLARACIÓN (2023)


El 26 de noviembre de 1986, junto a las ciudades de Évora y Toledo, la mal denominada ‘Ciudad Vieja’ de Cáceres -traducida del inglés Old Town por las bravas-, fue inscrita con el número de orden 384 en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO (1).

La inclusión se debió, más a sus propios méritos patrimoniales y a los tiempos de vacas gordas de la presidencia española de la UNESCO por Federico Mayor Zaragoza, que a la fragilidad técnica del expediente, que hoy no hubiera resistido el menor análisis evaluador. 

Pese a la colaboración del Ayuntamiento, Consejería de Cultura de la Junta de Extremadura y Ministerio de Cultura, el exiguo expediente de la candidatura adolecía de pobreza investigadora y fragilidad bibliográfica, técnica y documental (27 páginas y plano del Casco Antiguo a escala 1:2.000), sin haber recabado asesoramiento alguno de los profesionales de la Facultad de Filosofía y Letras. 

Traducido al francés y rubricado por Dionisio Hernández Gil, Director General de Bellas Artes y Archivos del Ministerio de Cultura, -en representación del Estado Parte español, firmante de la Convención del Patrimonio Mundial en 1982-, fue presentado al Comité del Patrimonio Mundial el lunes 22 de diciembre de 1985. 

En la sede de UNESCO-París, la candidatura extremeña fue defendida por Léon Pressouyre, historiador francés de arte medieval de la Universidad París-Sorbona, miembro del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios Históricos (ICOMOS), y avalada por los 21 miembros del Comité del Patrimonio Mundial, en presencia del alcalde Juan Iglesias Marcelo y de Juan Bazaga Sánchez, concejal de Relaciones Internacionales, como representantes municipales.

Resultó paradójico, por sorprendente, que los Criterios propuestos en el expediente de la candidatura, asumidos por el Estado Parte para justificar la inscripción fueran: 

Criterio (i): “Representar una obra maestra del genio creador humano” y Criterio (iii): “Aportar un testimonio único o, al menos, excepcional de una tradición cultural o de una civilización viva o desaparecida”, fueran desestimados y sustituidos por el Comité del Patrimonio Mundial (CPM). 

Lejos de rechazar el expediente, como hubiese correspondido por carencia justificativa de fundamentación patrimonial, el Comité del Patrimonio Mundial (ICOMOS) los modificó completamente sobre la marcha: 

Eliminó el Criterio (i) por no procedente; 

Reformuló el Criterio (iii), argumentando que: “Las murallas de Cáceres aportan un testimonio excepcional de las fortificaciones realizadas por los Almohades en España. Comparada con la Torre de Espantaperros de Badajoz o la Torre del Oro de Sevilla, la Torre Mochada de Cáceres se integra en un conjunto de muros y torres representativo y largo tiempo conservado”.

Según mi opinión, este argumento de ICOMOS, sobre el que gravitó la declaración, no tenía solidez patrimonial bastante y, menos aún, teniendo en cuenta el estado de deterioro y abandono de la muralla de Cáceres.

E incluyó el Criterio (iv): Ser un ejemplo sobresaliente de un tipo de edificio o de conjunto arquitectónico o tecnológico, o de paisaje que ilustre una etapa significativa o etapas significativas de la historia de la humanidad”:

“Como varias ciudades de Italia, Cáceres ofrece un ejemplo eminente de villa dominada, de los siglos XIV al XVI, por poderosas facciones nobiliarias rivales, que dictaron la organización del espacio mediante la implantación de casas-fortaleza, casas-palacio y torres. Este ejemplo es considerado único por las características históricas específicas de esta villa de Extremadura, dónde se concitan, desde la Edad Media al Clasicismo, las influencias artísticas más diversas y más contradictorias (del islam, gótico del norte, renacimiento italiano, de América, etc.)

¿Cómo es posible que este Criterio (iv) no se propusiera por los redactores del expediente…? Algo inaudito, siendo la esencia arquitectónica del Casco Antiguo, reconocido en 1968 como Tercer Conjunto Monumental de Europa, tras Praga y Taillín.

Fig. 1. ‘Ciudad Vieja’ de Cáceres, Patrimonio Mundial de la UNESCO (1986)

Fotograma aéreo de Cáceres (2005)

En fin, eran tiempos gloriosos en los que una ciudad histórica española podía acceder a Bien del Patrimonio Mundial sin contar con un expediente razonado, sin  Plan Especial de Protección y Rehabilitación (que comenzó a redactarse en 1986 a toda prisa, pero a toro pasado), ni sus correspondientes instrumentos de gestión, que garantizasen el mantenimiento de las condiciones de universalidad, excepcionalidad e integridad del Bien declarado por la UNESCO, definiesen el modelo futuro de ciudad histórica e integrasen políticas urbanísticas-patrimoniales y rehabilitadoras-refuncionalizadoras. Cáceres aprovechó muy bien la coyuntura.



[1] Unesco. (1986): Old Town of Cáceres. Province of Cáceres. State Party, Spain. World Heritage List. File name 384. Decision of The World Heritage Committee General Conference, Paris, 26/11/1986.

No hay comentarios:

Publicar un comentario