lunes, 16 de octubre de 2023

LOS APARTAMENTOS TURÍSTICOS EN LA CIUDAD DE CÁCERES: REHABILITACIÓN Y REFUNCIONALIZACIÓN DEL CONJUNTO HISTÓRICO.

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3.1.2. Recursos patrimoniales

Sin duda, el patrimonio arquitectónico contenido dentro del Conjunto Histórico es el recurso básico del turismo cacereño, con la imagen de marca internacional que le confiere la declaración de Patrimonio Mundial. En este ámbito se ubica la mayoría de los Bienes de Interés Cultural (BIC), desde que en 1930 fuera protegida la muralla almohade, por lo que la distribución de los BIC de Cáceres afecta, básicamente, a tres áreas (Figura 3):

• Casco Antiguo Intramuros (Ciudad Monumental), delimitado por la muralla del siglo XII y afectado por las declaraciones de Conjunto Histórico (1949) y Patrimonio Mundial (1986). Asimismo, incluye diez BIC declarados bajo la categoría de Monumento.

• Centro Histórico / Conjunto Histórico, que comprenden todo el espacio objeto de estudio, con excepción del Casco Intramuros. En esta zona se localizan 8 BIC, todos ellos declarados bajo la figura de Monumento.

 • Zonas externas al Conjunto Histórico, con el resto de BIC de Cáceres dispersos por un espacio periurbano amplio, con categorías patrimoniales diversas.

Figura 3. Localización de los BIC de la ciudad de Cáceres.

Fuente: Elaboración propia

3.2. Rehabilitación y refuncionalización: Planeamiento y gestión patrimonial

3.2.1. Rehabilitación patrimonial

En un diagnóstico previo sobre la gestión del patrimonio cacereño[13], el autor puso de manifiesto la dicotomía de procesos rehabilitadores, entre el modesto caserío de arquitecturas vernáculas del Centro Histórico, con infraviviendas en abandono y deterioro por insolvencia de los propietarios y carencia de ayudas públicas a la rehabilitación, y las arquitecturas singulares del Casco Intramuros, objeto de rehabilitación elitista y de cambio de usos (del residencial al terciario), mediante cuantiosas inversiones públicas y privadas. Estas rehabilitaciones han sido costeadas por esfuerzos económicos de instituciones, fundaciones y empresarios privados que han permitido abrir palacios al uso turístico[14], así como habilitarlos para nuevos usos administrativos, hoteles, restaurantes, museos, centros culturales y equipamientos universitarios[15].

Entre las intervenciones destacan, por sus características y el dinamismo que aportan, las llevadas a cabo por fundaciones privadas:

• Fundación Mercedes Calles y Carlos Ballestero en el Palacio de los Becerra (XV-XVI). Inaugurada en abril de 2006, tras una rehabilitación emblemática de la sede, superior al millón de euros, la Fundación alcanzó el 10 de abril de 2009 (Viernes Santo) los 3.697 visitantes, cifra techo desde su inicio, llegando en 2014 a superar la cifra del millón de visitas, y en junio de 2019 la cifra de 1.611.914 visitantes.

• Fundación Helga de Alvear en la Casa Grande. Desde el 3 de junio de 2010, el Centro de Artes Visuales Helga de Alvear se ubica en la Casa Grande, arquitectura burguesa regionalista montañesa de 1910, tras el primer proyecto museístico de los arquitectos Emilio Tuñón y Luis Moreno Mansilla.

• Fundación Tatiana Pérez de Guzmán el Bueno en el Palacio de los Golfines de Abajo. Se constituyó en abril de 2012 con el objetivo de gestionar el patrimonio legado por su impulsora. En junio de 2013, tuvo lugar la presentación oficial en Cáceres, en la sede del Palacio de los Golfines de Abajo (XV-XVI) -que alojó a los Reyes Católicos en 1477 y 1478, con el escudo real en fachada-. La última fase de musealización contó con una inversión de 300.000 euros de fondos propios, a través de un proyecto dirigido por un equipo de investigación del Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Extremadura, al objeto de conservación y restauración del patrimonio histórico, e impulso de la investigación científica, de la naturaleza y el medio rural. En 2018 censó 30.000 visitantes.

De enorme interés resulta reseñar, asimismo, el papel jugado por entes y planes en materia de intervención. A continuación, se detallan los que han resultado claves:

• Plan Director de Intervención de la muralla de Cáceres. La muralla almohade del siglo XII cuenta con un perímetro de 1.140 m, 22 torres albarranas, 9 torres de flanqueo, 3 puertas y 2 accesos. Los lienzos de la muralla se encuentran incompletos por la desaparición de varios tramos en el siglo XIX, a tenor de la ordenanza municipal que permitía el desmantelamiento de la misma para ganar metros que incorporar a las viviendas o reutilizar el material para construcción. El Diario Oficial de la Unión Europea publicó el anuncio de licitación del concurso público para la redacción del Plan Director de la Muralla (2016), como fase previa a la realización de trabajos, con presupuesto de licitación de 280.000 euros, disponiendo la empresa adjudicataria de 8 meses para la definición de las intervenciones. Según especificaba el pliego de condiciones, el Plan Director debía incluir estudios previos, análisis y un nuevo diagnóstico de la muralla. Para ello se requería la realización de pruebas físico-químicas y análisis por ultrasonidos. En enero de 2018, una inversión inicial de 1.000.000 de euros, con financiación del 70%, procedente de los ministerios de Fomento y Educación, -a través de la Comisión Mixta del 1,5% cultural-, y del 30% del Ayuntamiento de Cáceres, iba a permitir abordar en una primera fase la restauración del bastión, lienzos y torres del sector SE, el tramo más deteriorado, conforme al Contrato de Servicio de Asistencia a la Redacción del Proyecto y Dirección de Obras de la Restauración de la Muralla de Cáceres.

• Consorcio Cáceres Ciudad Histórica. Es obligado valorar el trabajo realizado, en materia de intervenciones, del Consorcio Cáceres Ciudad Histórica, cuyas tareas se han centrado en el mantenimiento, conservación, renovación, apertura al turismo y accesibilidad del patrimonio. La apertura al público en 2014 de la Torre del Palacio de Diego de Ovando o de las Cigüeñas (XVI), sede del Gobierno Militar, se ha convertido en un nuevo recurso turístico que permite la contemplación de la ciudad y territorio en 360º desde la atalaya más alta del Casco Antiguo.

Asimismo, se han producido otras actuaciones patrimoniales dignas de ser reseñadas como la obra de entrada al Oratorio de San Pedro de Alcántara (XVII); la reparación de las humedades del Baluarte de los Pozos, que afectaban al centro de interpretación y a la propia torre (XII); la accesibilidad a la Plaza de San Jorge, mediante rampa integrada con el entorno; la mejora de la señalización del Camino de Santiago a su paso por Cáceres, y la modernización de la señalética con 84 placas de metacrilato en todos los monumentos del Casco Intramuros.

Otras intervenciones, en fase de ejecución, repercutirán sobre la rehabilitación y funcionalidad de inmuebles como la Casa Vargas Figueroa, donde la Congregación de Misioneros de la Preciosa Sangre invertirá 1,5 millones de euros para su reconversión en albergue, un restaurante, una sala de proyectos sociales y un centro de interpretación del patrimonio de los Marqueses de Ovando, linaje que cedió esta casa al obispado cacereño. En la Casa de los Paredes-Saavedra (XIV-XVI), sus actuales propietarios, abordan su rehabilitación con proyecto de Emilio Tuñón para vivienda propia, habilitando once suites para albergue de lujo como prolongación del hotel Atrio 5 estrellas Relais & Châteaux, ubicado a 50 m. Finalmente, sobre la Casa de la Roca o Palacio de Godoy (XVI), ubicado extramuros en la Plaza de Santiago, se ha diseñado un proyecto liderado por el grupo peruano Scipión Perú, para transformar el edificio patrimonial en un hotel de 5 estrellas.

Tras estas intervenciones, Cáceres contaba en el año 2017 con un total de 26 casas-fuertes o casas-palacio que eran parcialmente visitables en la Ciudad Monumental, y que, sumadas a los edificios históricos, elevan hoy el número a 33, frente a los 13 (domicilios y conventos) de uso privado exclusivo. Algunos palacios combinan el doble uso privado de domicilio familiar y público de restauración turística: Golfines de Arriba (XVI), de la familia Churruca y López Montenegro (restaurante Golfines); Saavedra-Torre de Sande (XVI), de la familia del Vizconde de Rodas (restaurante Torre de Sande), con gran atractivo y demanda turística; Casa de Durán de la Rocha, domicilio/taberna Lancelot, y la Casa de Ovando-Aldana, domicilio/restaurante La Cacharrería. Sin duda, el Palacio de Carvajal con su singular torre redonda (XV-XVI), propiedad de la Diputación y sede emblemática del Patronato Provincial de Turismo y Artesanía, sigue siendo la referencia obligada turística-patrimonial de cómo ensamblar el Centro de Interpretación de la Provincia de Cáceres y la finalidad administrativa, siendo permeable y visitable en su planta baja el zaguán con la maqueta de la Ciudad Monumental, el patio renacentista y el renacentista jardín posterior.



[13] Campesino, A.-J. (2009): “Cáceres: gestión reciente de una ciudad del Patrimonio Mundial (1986- 2008)”, en De las Rivas, J. L. (Coord.). Actas del Simposio Internacional Ciudad sobre Ciudad. Interferencias entre pasado y presente en Europa. Fundación del Patrimonio Histórico de Castilla y León, y Caja Duero. Valladolid, pp. 291-325.

[14] Campesino, A.-J. (2004): “La revitalización patrimonial con fines turístico-culturales”, en Pardellas, X. X. (Ed.). Potencial turístico de territorios periféricos. Servizo de Publicacións de la Universidade de Vigo, Vigo, pp. 51-71.

[15] Gil, L. (2013): Cáceres: Rehabilitación de edificios patrimoniales para usos universitarios. Trabajo Fin de Grado, dirigido por el doctor Antonio-José Campesino Fernández. Departamento de Arte y Ciencias del Territorio, Cáceres. (69 p. + Anexo planimétrico). (Inédito).


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